Gladys lleva más de 48 años en La Palomera. Vive en “la bajada del artista”, en el sector Santo Domingo, justo al lado de una torrentera, donde además se filmó “El Retén de Catia” en 1984. Durante la grabación, la casa de Gladys funcionó como camerino para los artistas. En aquella época cuando su familia construyó la casa, el terreno era bastante grande y no había otras construcciones al frente. Gladys cuenta que “todo eso por allí era puro monte y culebra” pero poco a poco se fue ocupando. Previendo que todo terminaría por estar construido, decidieron tomar un pequeño espacio frente a su casa, y lo transformaron en huerto. Comenzaron con algunas plantas medicinales. Ahora tienen todo tipo de plantas incluyendo comestibles, medicinales y ornamentales. El esposo de Gladys es quien se encarga de podar y cosechar lo que crece en el terreno. La mayoría de las especies que siembran provienen de un terreno que tienen en Sisipa, Gavilán. Además de sembrar, Gladys atiende una pequeña bodega en su casa, donde vende comida, chucherías y algunos objetos de uso cotidiano.